Tres mártires del siglo XX en España terminaron su pasión el 17 de noviembre de 1936: dos hermanas de la Caridad en Madrid y un lasaliano en Barcelona. Una de las dos primeras, Josefa Gironés, dijo tras emitir sus primeros votos el 19 de julio de 1936, con las iglesias de Madrid en llamas: “¡Ya puedo ser mártir!”.
En Córdoba se conmemora a los santos mártires Acisclo y Victoria (313); en Japón se celebra el aniversario del martirio del beato samurai León Saisho Shichiemon Atsutomo (1608) y del de los santos sacerdotes dominicos Jordán Ansalone y Tomás Hioji Rokuzayemon Nishi (1634); en Paraguay (de donde procedía aunque nacido en la España europea) y Brasil (pues a ese país pasó después el territorio de las misiones del río Ijuí, que desemboca en el Uruguay hoy en la frontera brasileño-argentina), el del sacerdote jesuita san Juan del Castillo (1628); en Francia, el del beato sacerdote Lope Sebastián Hunot (1794); en Ucrania y Polonia se conmemora al obispo mártir beato Josafat Kocylovskyj (1947). En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado a tres mártires y un confesor de este día de los años 1931 (el sacerdote Nicolás Vinogradov, confesor), 1935 (la monja Eugenia Lysova), 1937 (el sacerdote Alejandro Petropavlovsky) y 1941 (el sacerdote Ismael Bazilevsky).