Dos mártires del siglo XX en España terminaron su pasión el 26 de octubre de 1936: los claretianos Andreu Feliu Bartomeu y Pau Castellà Barberà, misioneros durante muchos años en Guinea Ecuatorial. Otros seis mártires nacieron un 26 de octubre: José María Muro Sanmiguel, sacerdote secular que se hizo dominico en Calanda porque quería ser «misionero y mártir»; el sacerdote diocesano Antonio Silvestre Moya, que ofreció su vida el día antes de morir y fue dos veces fusilado; el padre de familia Arturo Ros Montalt, al que arrojaron vivo a un horno de cal ardiendo; el prior del monasterio benedictino de El Pueyo (Barbastro), Mauro Palazuelos, que manifestó su alegría por dar la sangre por Cristo; el sacerdote claretiano Juan Prats Gibert y el laico almeriense Luciano Verdejo Acuña, adorador nocturno.
En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado a dos mártires de este día de 1937: el arcipreste Nicolás Ermolov y el sacerdote Inocencio Kikin.
Fue la cuarta beatificación de mártires del siglo XX en España, y con sus 122 beatificados triplicaba los 40 hasta entonces beatificados en las ceremonias de 1987 (3 carmelitas), 1989 (26 pasionistas de Daimiel) y 1990 (10 lasalianos y un sacerdote pasionista: los 10 mártires de Turón ya canonizados con san Jaime Hilario). También fue la primera con más de una causa, ya que eran dos grupos: los 71 hospitalarios -entre ellos los primeros mártires colombianos– de la causa encabezada por Braulio María Corres y los 51 claretianos de Barbastro, causa encabezada por Felipe de Jesús Munárriz.
La beatificación levantó cierta polémica de la que solo he encontrado (en ABC el 7 de noviembre de 1992, página 89) una huella, referida a una carta pastoral publicada entonces por el arzobispo de Valladolid, Monseñor José Delicado Baeza, que titulo nada menos que «Víctimas inocentes, héroes rojos y mártires cristianos».
En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado a dos mártires –Lorenzo Levchenko (1937) y Alejandro Pozdeyevsky (1940)- y dos confesores –Juan Letnikov (1930) y Nicolás Mogilevsky, metropolita de Alma-Ata (1955)- de este día.
Del minero Isidro Fernández se dice en la Causa general que fue degollado como un cerdo.
Mártires de Nembra.
Ocho mártires del siglo XX en España terminaron su pasión el 21 de octubre de 1936: cinco dominicos del convento de Montesclaros en Cantabria, beatificados en 2007, y tres de los cuatro mártires de la parroquia de Santiago de Nembra (Concejo de Aller, Asturias) -el párroco Genaro Fueyo (casi 73 años) y los mineros Segundo Alonso (48 años) e Isidro Fernández (43 años)- que, junto con el estudiante Antonio González Alonso (24 años, había sido asesinado el 11 de septiembre anterior) fueron beatificados en Oviedo el 8 de octubre de 2016, y cuya fiesta litúrgica se celebra precisamente el 21 de octubre.
Es además aniversario de la beatificación de 109 claretianos celebrada el sábado 21 de octubre de 2017 en Barcelona (la fiesta litúrgica de estos beatos es el 1 de febrero). El prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, cardenal Amato, dijo en su homilía en la Sagrada Familia que la historia de la persecución religiosa española «es la historia del amor que vence al odio» y que la sangre de los mártires es «la savia vital para el dinamismo de la Iglesia española actual».
En Japón es aniversario del martirio del sacerdote jesuita beato Julián Nakaura Jingoró (1633); en Corea del martirio del joven de 13 años san Pedro Yu Tae-ch’ol (1839). En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado a 20 mártires de 1937. De ellos fueron arrestados y ejecutados juntos el arzobispo Demetrio Dobroserdov, el archimandrita Ambrosio Astakhov, el abad Pacomio Turkevich, el diácono Juan Khrenov, el monje Varlaam Efimov, la monja Tatiana Besfamilnaya, más los laicos Nicolás Rein, María Volnukhina y Esperanza Azhgerevich; otro grupo lo formaban el arcipreste PeterNikotin más los laicos Víctor Frolov, Juan Rybin, Isabel Kuranova y Nicolás Kuzmin; y fuera de estos grupos quedan los mártires Jonás Lazarev (obispo), Serafín Shchelokov (archimandrita), Pablo Preobrazhensky (arcipreste) y tres sacerdotes: Pedro y Basilio Ozeretskovsky, más Vladimiro Speransky.
Cárcel de San Antón, antes Escuelas Pías, con entrada en la calle Farmacia de Madrid.
Hay siete mártires del siglo XX en España que nacieron un 20 de octubre, entre ellos el novicio hospitalario de 25 años Juan Alcalde Alcalde, al que habían hecho un simulacro de fusilamiento, y que fue el que con más fuerza gritó ¡Viva Cristo Rey! entre los presos de la saca de San Antón (Prisión Provincial de Hombres número 2) hacia Paracuellos el 28 de noviembre de 1936 (uno de ellos era el dramaturgo Pedro Muñoz Seca).
Hoy se conmemora en Turquía y Grecia el martirio de San Andrés «in Crisi» o «Calibita» (767, era cretense y murió en Constantinopla). En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado al arcipreste Nicolás Kazansky (1942).
Sant Pere dels Arquells, donde fusilaron y quemaron a 18 claretianos.
19 mártires del siglo XX en España terminaron su pasión el 19 de octubre de 1936: el sacerdote paúl Benjamín Ortega en Madrid y 18 claretianos en el caserío Mas Claret de Sant Pere dels Arquells (Lérida), cuyos cuerpos quemaron durante cuatro días después de fusilarlos.
En las islas británicas se conmemora el martirio de san Felipe Howard (1595); en Japón el de los santos dominicos Lucas Alfonso Gorda (sacerdote) y Mateo Kohioye (1634); en Francia, Estados Unidos y Canadá, el del jesuita san Juan de Lalande (1646, en este día se celebra además la fiesta de san Juan de Brébeuf y sus compañeros); en Polonia, el de Jerzy Popiełuszko (1984). En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado como mártir al sacerdote Juan Rybin (1937).
Fosa común con 400 muertos de la revolución y la guerra en Cervera (Lérida).
17 mártires del siglo XX en España terminaron su pasión el 18 de octubre de 1936: un marista navarro asesinado en Málaga, dos sacerdotes almerienses asesinados en Antas, dos laicos cartageneros (Francisco Roselló e Isidro Juan, a quienes prometieron salvar si gritaban muera Cristo, pero gritaron ¡Viva Cristo Rey!) y doce claretianos asesinados en Cervera (Lérida), entre ellos un médico que había curado durante un mes a su asesino.
Zona al este del cementerio de Paterna, conocida durante la guerra como Picadero.
Cuatro mártires del siglo XX en España terminaron su pasión el 14 de octubre de 1936: la laica dianense Ana María Aranda y tres claretianos martirizados en Torrelavega (Cantabria): los religiosos Félix Barrio y Joaquín Gelada, más el sacerdote Isaac Carrascal.
En esta fecha se conmemora también el martirio de san Calixto, papa (222); el del beato sacerdote Jacobo Laigneau de Langellerie en Francia (1794); en Polonia y Alemania, el de los beatos sacerdotes Estanislao Mysakowski y Francisco Roslaniec (1942); en Ucrania el del beato sacerdote Roman Lisko (1949). En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado a seis mártires de esta fecha: uno de 1918 (el arcipreste Alejo Stavrovsky), uno de 1920 (el sacerdote Miguel Vologodsky) y cuatro de 1937: el laico Juan Artemov, los arciprestes Alejandro Agafonikov y Nicolás Kuligin, más el sacerdote Jorge Arkhangelsky.
Atentado contra Claret en Holguín (Cuba) el 1 de febrero de 1856.
Hasta el momento hay un único mártir beatificado del siglo XX que murió el 11 de octubre de 1936, el coadjutor salesiano de Sarrià (Barcelona) Ángel Ramos Velázquez, mencionado en la entrada del 9 de marzo. La entrada de hoy incluye una biografía del padre Claret por José Javier Echave-Susaeta.
Como preparación para el aniversario, el 14 de octubre, de la canonización del obispo mártir Óscar Romero, aconsejo la lectura del libro Monseñor Óscar Romero. Pasión por la Iglesia, que publiqué con motivo de su beatificación.
En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado a cuatro mártires de esta fecha: una laica de 1925 (Anna Lykoshina), un monje-sacerdote (Hilario Gromov) y una monja (Micaela Ivanova) de 1937, más una novicia de 1942 (Tatiana Chekmazova).
Imagen de la III marcha misionera en honor al beato Bartolomé (15 de marzo de 2014).
18 mártires del siglo XX en España terminaron su pasión el 2 de octubre de 1936: cuatro salesianos -entre ellos, Enrique Saiz y Pedro Artolozaga– y un sacerdote -el padre Isidoro– de los Sagrados Corazones en Madrid; en Alicante dos sacerdotes que eran hermanos y una catequista y obrera (Florencia Caerols); dos sacerdotes, también hermanos, en Almería; una servita y un salesiano en Valencia; un escolapio y un operario diocesano –Isidoro Bover– en Castellón; dos dominicos en el barco prisión Cabo Quilates, en Bilbao; un claretiano en Fernán Caballero (Ciudad Real) –Felipe González-Heredia Barahona, el último de los asesinados allí- y un laico en Jaén.
En Francia se conmemora a los santos mártires Leodegario (obispo, 680) y Gerino (677), y al beato sacerdote Jorge Edmundo Rene (1794); en Japón a los beatos beatos Luis Yakichi y Lucía, esposos, con sus hijos Andrés y Francisco (1622); en Rumanía y Hungría, se conmemora al beato Szilárd Bogdánffy, obispo mártir del comunismo (1953). En Rusia, la Iglesia ortodoxa ha glorificado a cinco mártires de esta fecha: uno de 1918 (el arcipreste Constantino Golubev), otro de 1919 (el arcipreste Nicolás Iskrovsky), dos de 1938 (la novicia María Mamontova-Shashina
y el arcipreste Nilo Smirnov) y uno de 1940 (el sacerdote Nicandro Grivsky).