Dios siempre da la gracia para soportar el martirio Uno de los cuatro mártires del siglo XX en España nacidos un 2 de enero, asesinado en Mollerusa, recordaba que el martirio es gracia que Dios da


Cuatro mártires del siglo XX en España nacieron un 2 de enero: un claretiano de Xàtiva asesinado en Barbastro; un sacerdote diocesano en Mollerusa (Lleida), una hermanita de la caridad burgalesa y San Jaime Hilario, hermano de las Escuelas Cristianas.

“¡¡¡Muero por la Congregación y por las almas!!!
Del alumno de teología claretiano José María Blasco Juan, de 24 años y natural de Xàtiva (Valencia), sabemos que antes de ser fusilado el 15 de agosto de 1936 en el km 3 de la carretera a Berbegal-Sariñena de Barbastro, escribió en la nota de despedida a su congregación: “¡¡¡Muero por la Congregación y por las almas!!!”. Fue beatificado el 25 de octubre de 1992.

Me dejaría cortar un dedo por una muerte así

Pio Salvans Corominas, de 58 años y natural de La Guàrdia de Sagàs (Barcelona), fue ejecutado el 3 de septiembre de 1936 en Mollerussa (Lleida), donde desde 1927 era capellán de los hermanos de las Escuelas Cristianas (La Salle), y beatificado el 13 de octubre de 2013 en Tarragona. Estudió en el seminario de Solsona y se ordenó en 1902. Según lo publicado por Josep Maria Montiu de Nuix, comentando el asesinato de Josep Morta, párroco de Navàs (cometido el 5 de octubre de 1934), dijo: “Me dejaría cortar un dedo de la mano si me aseguraran una muerte como la suya”. Y si le decían que era difícil ser mártir, respondía: “Dios siempre da la gracia para soportar el martirio”.

Al estallar la guerra, se refugió en Cal Cabrer, pero para no comprometer a sus benefactores, regresó a su piso en Mollerussa. Lo sacaron de la cama para preguntarle si era el capellán de los hermanos, a lo que respondió que sí. Pidió permiso para vestirse la sotana y se despidió de su ama de llaves con un “hasta el cielo”. Lo fusilaron a la entrada del cementerio y quemaron sus restos.


Isidora Izquierdo García
, de 51 años y natural de Páramo del Arroyo (Burgos), fue fusilada con otras cuatro hijas de la Caridad del asilo de Bétera (Valencia) más una seglar que convivía con ellas, el 9 de diciembre de 1936 en el picadero de Paterna (Valencia) y beatificada en Tarragona el 13 de octubre de 2013.

Sobre san Jaime Hilario, hermano de las Escuelas Cristianas, escribí al hablar de la canonización de los mártires de Turón.

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