Ocho de los asesinados el 3 de septiembre de 1936 han sido beatificados como mártires del siglo XX en España: cuatro maristas -los hermanos Aquilino, Ligorio Pedro, Félix Lorenzo y Fabián– de Les Avellanes (Lérida) y, en la misma provincia, en Mollerussa, el capellán de los lasalianos –Pío Salvans Corominas-; más tres Hermanas de la Caridad –Concepción Pérez, Dolores Caro y Andrea Calle– en Vallecas (Madrid).
En Japón es aniversario de los beatos mártires Bartolomé Gutiérrez, Vicente Carvalho y Francisco Terrero, sacerdotes de la Orden de Ermitaños de San Agustín; Antonio Ishida, jesuita; Jerónimo Jo y Gabriel de la Magdalena, franciscano (1632); en Francia del beato Andrés Abel Alricy, sacerdote, y sus 71 compañeros y de los sacerdotes Juan Bautista Bottex, Miguel María Francisco de la Gardettte y Francisco Jacinto le Livec de Trésurin (1792); en Corea de san Juan Pak Hu-jae y sus cinco compañeros de martirio (1839). En Rusia, la Iglesia Ortodoxa ha glorificado a tres mártires de este día: los sacerdotes Alejandro Elokhovsky (1918) y Pablo Yagodinsky (1937), más el monje Ignacio Dalanov (1942).