El 19 de diciembre de 1936 fueron asesinados en Montcada i Reixac dos de los capuchinos beatificados en Barcelona el 21 de noviembre de 2015, ambos sacerdotes: Jordi (Doroteu de Villalba dels Arcs) Sampé Tarragó, al que faltaba poco para cumplir 29 años, ya que nació el 14 de enero de 1908, y Jaume (Martí de Barcelona) Boguñá Casanovas, de 41 años (nació en Sant Andreu de Palomar el 4 de octubre de 1895), que vistiendo de laico pensó poder dedicarse a la investigación.
Testimonio de una persecución tozuda
El caso de estos dos capuchinos deja claro que la persecución sangrienta contra todo lo que representara a la religión católica iba mucho más allá de una explosión de rabia o entusiasmo inicial. Fray Martín, según el resumen biográfico publicado el 15 de noviembre de 2015 en Catalunya Cristiana, seguía dedicado a la lectura e investigación en archivos y bibliotecas, confiado en que su nuevo aspecto laical no despertaría sospechas.
Pero no fue así, y los perseguidores fueron siguiéndole las huellas hasta mandar una partida para detenerlo el 19 de diciembre de 1936, que sin embargo no lo encontraron a él, sino al otro religioso que se refugiaba en esa casa (fray Doroteo), y no contentos con esta presa amenazaron con asesinar al cuñado de fray Martín, por lo que su hermana dijo a los perseguidores la dirección donde se encontraba. Ese mismo día fueron asesinados los dos frailes.
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